Bye, Toro, Bye

BAJO SOSPECHA

Bibiana Belsasso
Bibiana BelsassoLa Razón de México
Por:

La última encuesta que se había dado a conocer sobre el caso de Félix Salgado Macedonio consideraba que el INE había estado bien o muy bien en quitarle la candidatura al gobierno de Guerrero. Al autodenominado Toro apenas lo respaldaba el 27 por ciento, mientras que el 47 por ciento consideraba que el INE había actuado de forma imparcial. En la misma encuesta, el 60 por ciento consideraba que la declaración de Félix de que si él no era candidato no habría elección en Guerrero, era mala o muy mala, y sólo un 6 por ciento decía que era una buena declaración.

Más de un mes de incertidumbre

Desde la resolución del INE, el 26 de marzo, el senador con licencia ha mantenido una defensa de su candidatura, con recursos legales y actos masivos.
Desde la resolución del INE, el 26 de marzo, el senador con licencia ha mantenido una defensa de su candidatura, con recursos legales y actos masivos.Foto: Cuartoscuro

En realidad, la candidatura de Félix tendría que haber concluido desde que se hicieron las acusaciones en su contra por violación y abuso sexual. Puede ser que el candidato sea responsable o no de esos delitos, no lo sabemos, pero no hubo ni siquiera una investigación seria sobre las mismas. Para terminarla de amolar ahora nos enteramos que la dirigencia de Morena canceló esa investigación porque la denunciante supuestamente había fallecido… hasta que resultó que la denunciante reapareció con vida y ratificó la denuncia.

Muy probablemente esas denuncias, como se dijo en su momento, fueron activadas por la gente de otro contendiente, Pablo Amilcar Sandoval, ahora también sin posibilidad de ser candidato, pero eso no las hace desechables. El caso de Félix y de Pablo Amílcar recuerda al de Colosio y Camacho en 1994, la animadversión, la lucha interna, terminó matando a ambos: a uno en la más cruel de las realidades, al otro metafórica y políticamente. El mal manejo partidario de todo el proceso terminó generando costos para todos, incluyendo el propio partido.

Por si eso no fuera suficiente la candidatura de Félix tenía otro escollo que no era fácil de superar: los militares. Hace un par de semanas mi compañero Jorge Fernández Menéndez recordó que “iniciado el sexenio cundió el enojo, no querían ni reunirse con él (con Félix Salgado Macedonio), en las fuerzas armadas porque se designó a Félix presidente de la Comisión de Defensa del Senado, y éste nombró como secretario técnico de la comisión a Saúl López Sollano, quien fue miembro de las guerrillas en Guerrero en los setenta, donde era conocido como La Bruja. Estudió durante algunos años en la Universidad Patricio Lumumba, de la entonces Unión Soviética, donde recibió también preparación política y armada; y formó parte del Ejército Sandinista de Liberación Nacional en Nicaragua. En la izquierda guerrerense, según fuentes militares, se lo identifica en realidad como un militante vinculado al EPR. López Sollano es responsable del análisis y evaluación de los ascensos de militares y marinos, entre otras funciones que contempla la Secretaría Técnica de esa comisión del Senado”. No hay constancia de que esa relación haya mejorado con el tiempo. López Sollano sigue siendo un cercanísimo colaborador de Salgado.

Sintetizando: todo se hizo mal en torno a la candidatura de Salgado Macedonio. Era, es verdad, el candidato más popular (probablemente en Guerrero lo sigue siendo) pero Morena también hubiera ganado el estado con cualquier otro aspirante, hombre o mujer. Las cosas se manejaron tan mal que ahora la elección está comprometida. Se especula que se podría designar como candidata a la hija de Salgado Macedonio, que no tiene carrera política alguna. Quién sabe, pero muy probablemente en lugar de enterrar esta crisis que no beneficia a nadie y menos aún a Morena, se la prolongaría porque sería evidente que Félix gobernaría detrás de bambalinas. ¿Por qué no olvidar toda esta historia y empezar de nuevo?. Hay posibles candidatos o candidatas serios que podrían ocupar muy bien esa posición. Y no hay tiempo, porque las elecciones son en menos de 45 días.

El caso de Raúl Morón era quizás más manejable, porque allí evidentemente se equivocó el partido al no entregar el informe de gastos de precampaña que el candidato sí había elaborado, pero recordemos que el argumento original del partido en estos casos fue que no había habido precampaña, cuando fue evidente que sí la hubo, por eso la mayoría de los magistrados terminaron también aceptando la única pena que contempla la ley de procedimiento electorales para esta falta, que es la cancelación de la candidatura.

En Michoacán el que sin duda estará maldiciendo su suerte es Cristobal Arias, que era uno de los favoritos para ser candidato. Terminó siendo desplazado de última hora por Morón y aceptó entonces la candidatura del partido de Pedro Haces, Fuerza Social por México. Ahora desde ese partido de reciente creación quizá sus oportunidades crezcan, pero llegar a alcanzar a Carlos Herrera Tello, el candidato de la Alianza, que estaba diez puntos debajo de Morón pero creciendo, se ve muy difícil. Hoy Arias está con apenas siete puntos en las encuestas.

Todo esto termina con un fortalecimiento del Tribunal, auqnue su presidente, José Luis Vargas, se quedó solo en la votación de Salgado Macedonio y acompañado apenas por el voto de Mónica Soto en el de Morón. También, por supuesto, fortalece al INE y deja fuera de lugar los intentos de descalificación que sufrió en los últimos meses. La relación entre el TEPJF y el INE no ha sido buena y el Tribunal en muchas ocasiones entró en contradicción con el Instituto, pero en esta ocasión las mayorías de ambas instituciones actuaron en la misma línea. También descalifica la versión que había manejado Morena de que en este tema el Tribunal le había dado la razón y que el INE había desconocido esa sentencia. Ahora ambos han quedado alineados.

El escenario para Morena luce mucho más complicado que a principios de año, en buena medida por los muchos errores del oficialismo, dentro y fuera de las campañas. A poco menos de 45 días para los comicios, la competencia real es cada día más interesante. Todavía habrá mucho por ver, analizar y juzgar. Por cierto, en el TEPJF y en la Fiscalía de Delitos Electorales existen ya más de dos mil demandas presentadas por todos los partidos.