Los BRICS desafían el poderío de Occidente

Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica conforman el bloque de economías emergentes denominado BRICS, como una alternativa al dominio de las economías occidentales y distinta al capitalismo salvaje del neoliberalismo.

Los jefes de Estado de las naciones BRICS se reunieron en Johannesburgo, Sudáfrica, y durante tres días debatieron la entrada de seis nuevos socios al grupo de economías emergentes con el objetivo de generar un nuevo orden mundial más justo y combatir la desigualdad y la pobreza que se mantiene en gran parte de naciones del planeta.

El 1 de enero del próximo año se van a sumar al BRICS Arabia Saudita, Argentina, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Etiopía e Irán con la intención de desafiar al grupo de países ricos del G-7, liderado por Estados Unidos y Europa, y acabar con la hegemonía de Occidente.

El bloque de los países BRICS es un duro crítico del bloque del G-7 por ser una especie de club elitista que promueve mantener el poder político y económico en manos de unos cuantos países, sin darle importancia a las economías emergentes y replantearse objetivos para generar un sistema económico más justo y equilibrado en sintonía con las características del mundo actual.

Esta vez la reunión del BRICS ha hecho mella a los países ricos, ya que uno de los líderes del bloque de economías emergentes se perfila como la primera potencia mundial: China, y el actual “enemigo” de Occidente, Rusia, son los que lograron la expansión del grupo para conseguir sus objetivos. Ambas naciones llevan años buscando una alianza consolidada que se ponga frente a frente y sirva de contrapeso al Grupo de los Siete.

No es para menos la preocupación de Occidente. El presidente brasileño, Lula da Silva, aseguró que con la ampliación del grupo de naciones en el BRICS representarán en números a 46 por ciento de la población mundial y conformarán 37 por ciento del PIB, contando con tres potencias petroleras que les darán un mayor poder en el suministro del oro negro.

En esta reunión que no contó con la presencia del presidente ruso, Vladimir Putin, por la situación actual del enfrentamiento entre Rusia y Ucrania, el mandatario envió un mensaje grabado, donde se manifestó en favor de una alternativa de instituciones financieras occidentales y lanzó una predicción sobre el declive del dólar estadounidense ante la actual desdolarización de los vínculos económicos mundiales.

Las naciones que conforman el bloque BRICS están cansadas del dominio económico que ejercen Estados Unidos y Europa, por ello han optado por la entrada de más países para forjar una alianza que represente a las naciones no occidentales que conforman el denominado sur global.

Ahora el reto para el renovado BRICS será mantener un sistema de entendimiento que defienda las posturas comunes de todos los socios y así poder trabajar en los temas que se pongan sobre la mesa por un bienestar global que diferencie al BRICS del G-7.