Un hombre australiano de 23 años asesinó a su bebé recién nacido porque no lo dejaba concentrarse en un juego de PlayStation.
Dijo que sí hirió a su bebé a propósito y confesó que antes de que lo matara intentó buscar ayuda para lidiar con su problema de adicciones.
De acuerdo con los reportes, el sujeto se encontraba solo con su bebé en la habitación, cuando la madre escuchó un fuerte llanto del menor, lo cual le provocó cierta duda, sin embargo, no tomó mucha importancia, ya que el padre le dijo que estaba envolviéndolo.
El fiscal del caso Mark Gibson, cree que el hombre mató a su bebé al darle un fuerte golpe en la cabeza o haciendo que se golpeara con otro objeto. Aparentemente después de violentar al menor continuó jugando a su Playstation hasta que se quedó dormido.
Después del golpe que recibió el niño, la madre llevó al bebé al doctor, sin embargo, ya era demasiado tarde, pues los médicos descubrieron que el menor tenía una hemorragia cerebral y por tanto tenía muerte cerebral.
Los médicos se reunieron con los padres, pues sospecharon que la muerte del bebé no fue natural, sino provocada, en seguida, el hombre huyó del hospital y se refugió lejos para evitar que la policía lo encontrara, aunque días después se entregó a las autoridades.
En la audiencia la madre se lamentó que no pudo hacer nada para salvar a su hijo. Se lanzó contra el padre del niño por no protegerlo.
“Era inocente y no podía defenderse. Es un acto de cobarde y tú eres su padre, se supone que debes protegerlo", dijo la mujer.